Sigamos en contacto
Sigamos en contacto

Tu propuesta de valor genérica está saboteando tus ventas

Propuesta de valor genérica

Cómo pasar del “meh” al “wow” en cualquier rubro. Ideal para emprendedores tradicionales y techies por igual.


El problema de sonar “como todos”

Abrís LinkedIn o TikTok, ves cinco negocios distintos… y todos claman ser “innovadores”, “de calidad” o tener “soluciones a medida”. ¿Resultado? La audiencia bosteza y sigue scrolleando.
Ese bostezo es la forma en que Internet te dice de forma silenciosa: “tu propuesta de valor es genérica”.

En este artículo vas a descubrir:

  • Por qué la propuesta queda insípida incluso cuando el producto es único.
  • Los 4 baches más comunes que aplastan la diferenciación.
  • Tácticas prácticas (y sencillas) para despegarte del montón.

¿Pero qué **** es una propuesta de valor?

En criollo: la promesa concreta de beneficio medible que le hacés a un segmento específico.
Si falta alguna de esas tres patas, la mesa se tambalea y tu mensaje suena a genérico.

La propuesta de valor es de base lo que haces, es ese servicio o ese conjunto de producos. Pero una buena propuesta de valor incluye cómo lo haces y para quién.

Recordá lo siguiente: cuando vendes, le estás proponiendo algo a tu cliente con lo que vas a terminar generandole valor para su vida o su empresa. En retribución tu negocio se beneficia capturando valor de esa misma propuesta inicial.

Podemos identificar 3 niveles de madurez:

  1. Una propuesta de valor genérica se ve como “vendemos x productos al mejor precio”.
  2. Una propuesta de valor un poco más trabajada, incluye el cómo y para quién “vendemos x productos para runners que necesitan rendimiento en climas fríos con calzado impermeable y térmico”.
  3. Una propuesta de valor de alto vuelo permite crear ofertas irresistibles y perfectament dirigidas.

Los 4 baches que convierten tu mensaje en “meh”

1 Mapa difuso

“Podemos vender en cualquier lado”.

  • Por qué pasa: miedo a “perder mercado”.
  • Efecto colateral: terminas hablando en abstracto, sin referencias culturales ni ejemplos locales.
  • Cómo lo arreglás: elegí un “playground” manejable (una ciudad, un sector, un nicho). Conquistalo, aprendé, escalá.

2 Promesa con sabor a nada

“Somos innovadores y centrados en el cliente”.

  • Por qué pasa: confundir eslógan con promesa.
  • Efecto colateral: nadie recuerda qué hacés realmente.
  • Cómo lo arreglás:
    1. Escribí la promesa en una frase que entienda tu abuela.
    2. Mostrá el antes y después en números.
    3. Testeala en voz alta; si tarda más de 10 s en explicarse, recortá.

3 Fetichismo técnico

“IA propia, servidor Go, barniz italiano triple capa”.

  • Por qué pasa: enamoramiento con el “cómo” en lugar del “para qué”.
  • Efecto colateral: tu cliente potencial recibe info irrelevante y abandona la página.
  • Cómo lo arreglás:
    • Traducí cada característica a una consecuencia tangible.
    • Usá la fórmula: “Esto significa que…”.
    • Ejemplo: “Backend en Go” → “Esto significa que tu app carga en 2 s, incluso con mala señal”.

4 Credenciales en el sótano

“Tenemos algunos clientes felices… pero mejor no presumir”.

  • Por qué pasa: síndrome del impostor, exceso de humildad o falta de proceso para recopilar testimonios.
  • Efecto colateral: confianza bajo cero; tu audiencia percibe más riesgo que beneficio.
  • Cómo lo arreglás:
    • Pide feedback al terminar cada proyecto.
    • Muestra números (aunque sean modestos): “12 comercios locales automatizaron sus pedidos”.
    • Aprovechá prensa barrial, premios pequeños, publicaciones en blogs de nicho.

Diagnóstico express: ¿tu propuesta de valor es genérica?

  1. ¿Podés resumir tu promesa en una sola frase sin mencionar palabras demaciado amplias como “innovador”?
  2. ¿Podrías señalar un mapa y decir “acá es donde empieza todo”?
  3. ¿Tus descripciones técnicas están ligadas a un beneficio cuantificable o a una transformación?
  4. ¿Tu web, tu forma de vender verbal o tus redes sociales, muestra o hablan al menos de un testimonio o caso real?

Si respondiste “no” a cualquiera: hay trabajo por hacer.

El antídoto: framework de 4 pasos

PasoAcciónResultado
1. Segmento pilotoElige un micro‑mercado con problemas claros.Mensaje hiper‑relevante.
2. Promesa cristalinaCompleta la fórmula: Para [segmento], logramos [beneficio medible] en [tiempo/costo].Claridad inmediata.
3. Beneficio > EspecificaciónReescribe cada caracteristica en términos de valor (beneficio).Mayor retención de atención y valor percibido.
4. Credenciales visiblesIntegra prueba social (logos, casos, métricas) como lo segundo que ves en tu web. Lo primero es tu propuesta 😉Confianza y conversión al alza.

Ejemplo rápido: del “meh” al “wow”

Versión genérica
“Somos una empresa de mobiliario innovador para todo tipo de espacios.”

Versión optimizada
“Para bares con menos de 20 m² diseñamos mesas plegables que liberan hasta un 30 % de espacio útil en 48 h, sin obras.”

Notá cómo:

  • Hay un segmento: bares chicos.
  • La promesa es específica, medible y con plazo.
  • No mencioné madera marina de Noruega (característica) hasta demostrar el beneficio.

Combatiendo los peros

¿Puedo atacar varios segmentos a la vez?
Podés, pero cada segmento requiere un mensaje dedicado o tu propuesta se diluye.

¿Y si mi negocio realmente sirve “para todos”?
Empieza por quien más te necesite y tenga capacidad de pago. El resto llegará por arrastre.


Arrancá el cambio en una tarde

  1. Auditoría DIY: abre tu web y tu brochure. Marca en rojo todo lo que suene a adjetivo vacío.
  2. Redacta tu promesa con la fórmula del paso 2.
  3. Publica tu primer testimonio antes de que termine la semana.
  4. Comparte este artículo si alguien más sufre de propuesta de valor genérica.

¿Querés feedback personalizado?

Te ofrezco diagnósticos exprés para afinar tu propuesta. Reservá una reunión y llevate tareas accionables desde la primera llamada.

Comments
Join the Discussion and Share Your Opinion
Add a Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Newsletter
Marcos de Trabajo
Solo consejos de productividad de alto rendimiento una vez al mes y herramientas top de última generación para tu flujo de trabajo diario.